La comunión (Parte 1)

Organizar una comunión y no caer en el intento

Parte 1

Queridas madres de España y padres, por supuesto. Seguro que andáis muy tranquilos organizando las fiestas navideñas (la comida, los regalos, los adornos...) si, si. Vuestro hijo ya ha comenzado la catequesis y en primavera recibirá la comunión. Estamos muy tranquilos porque falta mucho tiempo, verdad?

Siento desilusionaros un poquito pero... ¿os acordáis del día de vuestra boda? ¿Y del tiempo que llevo organizarla? ¿Qué os hace pensar que vuestra princesita no requiere la misma paciencia? Si, me centro mas en las niñas, ya que para los niños y los hombres son días menos especiales (como todo lo que sea llevar traje).

No sólo hay que escoger un restaurante, comprar un vestido y unos zapatos, y llamar a toda la familia. Y no, ese familiar que tiene una Nikon o Canon con un "tele" no se denomina fotógrafo profesional. Lo que me recuerda que hay que hacer los recordatorios, los detalles para los invitados y un pequeño reportaje el día C. ¿Cómo os quedáis ante esto? y no os he hablado de decoraciones ni flores... ¿Os suena todo esto verdad? Se empieza a parecer a vuestra boda...

Muy bien, como consejo primero, reservad un restaurante, mas que nada, por las fechas, ya que las comuniones coincide con el principio de la temporada de bautizos y bodas... 

Podéis crear unas invitaciones en familia para hacer llegar la noticia del evento a familiares y amigos que deseáis invitar. Pasareis tiempo juntos durante el invierno al calor del hogar haciendo manualidades.

Cuando pase febrero es el momento ideal para empezar a mirar la ropa de comunión, ya que saldrán las nuevas colecciones tras el desfile de Cibeles.

Preguntad a vuestros hijos que estilo desean, viendo fotos en Internet podéis tener una idea clara de qué pedir cuando vayáis a la tienda. 

Ellas querrán probarse varios modelos, dejad que disfruten vistiéndose pero sin alterar a las dependientas. Buscad el que favorezca mas en cuanto color de pelo o piel y facciones o cuerpo, no solo que sea bonito, con mucho adorno y brillante.

Una vez tengáis el modelo escogido,  y llegue a la tienda, concierta una cita con vuestro fotógrafo lleva a tu comulgador a la peluquería. 

Fotografía  de nuestros colaboradores London Studio

Una vez en el estudio el niño/niña se viste y comienza la sesión fotográfica. 

Aquí puedo aconsejaros que busquéis un equipo dinámico y con ideas originales, que sepa buscar un enfoque adecuado pero diferente a la clásica foto de recordatorio. 

Además tened en cuenta que el niño debe de disfrutarlo, sino las fotos no serán tan bonitas.

Y de momento hasta aquí los comuni-consejos, mañana más!